Una pizca de locura

¿No te apetece hacer locuras? Yo las hago a menudo, dejemos una nota de amor en un parabrisas de un coche cualquiera, corramos bajo la lluvia sin rumbo fijo, cojamos un bote prestado en la playa para poder ver el amanecer en medio del mar, ¿por qué no viajamos por todo el mundo con una mochila y sin billete de vuelta? desayunemos, comamos y cenemos helado. Suena bien, ¿no crees? Si quieres seguirme esta es mi mano y ese el camino, y recuerda que las cosas buenas no hace falta entenderlas, deja atrás las estúpidas normas del buen ciudadano y aprovecha para hacer cualquier cosa, lo que siempre soñaste, eso sí, lo que no puedes hacer es contárselo a nadie.